Apreciados socios y/o simpatizantes de DSR:
Un año más me dirijo a vosotros para haceros un mini resumen de cómo ha ido este año que está por acabar.
Como la mayoría de vosotros sabéis, hace pocas semanas que nuestro XI proyecto en Senegal ha «terminado». Pongo comillas, porque no es cierto que haya acabado ya que llevamos desde 2007 en esta aventura de solidaridad que justo acaba de empezar, y desde luego el trabajo que puede hacerse para con el prójimo es inacabable.
Sí que es cierto que nuestras/os voluntarias/os del proyecto Adama 2015 han vuelto a casa sanos y salvos con la satisfacción de haberlo dado todo en Missirah (Senegal), poblado que DSR tiene apadrinado desde 2012. El trabajo de DSR va mucho más allá de sacar una muela, hacer una prótesis, curar una herida, enseñar a cepillarse o confeccionar unas gafas. La historia que estamos creando, que estamos viviendo va de algo más profundo, difícil de explicar con palabras. Lo saben bien nuestros voluntarios, tanto los que acaban de regresar como los que han ido en campañas anteriores… La historia va de compartir, de tolerancia, de buen humor, de quitarse los prejuicios, de conocer a las personas, conocerse de verdad, de estar presentes, de vivir el momento, de pasar de la teoría a la práctica, del darse cuenta que la vida es mucho más de lo que sale por televisión…
Decir que el proyecto está totalmente instaurado en Missirah. Nuestro socio local, el comité de Santé, así como toda la población está encantada con DSR, tanto por el trabajo que allí realizamos como por el comportamiento ejemplar que nuestro equipo humano va teniendo año tras año en la aldea.
Además, es para mi un orgullo poder decir que finalmente hemos conseguido llevar una ambulancia, totalmente medicalizada a Missirah. Quiero recordar los esfuerzos llevados a cabo en 2013 por diferentes personas (en especial Tico y Madiop) para llevar una primera ambulancia que, por caprichos del destino acabó accidentada en los aledaños de Nouackchot. Dos años después, la mismísima Presidenta Francina Armengol, nos ha donado una nueva ambulancia, que esta vez sí hemos conseguido que llegue a su destino, no sin muchas dificultades por el camino.
Quiero agradecer, una vez más el gran trabajo que han llevado a cabo todos los voluntarios, tanto «tubabs» (blancos) como senegaleses. Parte de la magia de este proyecto reside precisamente ahí, a la colaboración de personas de diferentes razas, culturas, idiomas, países, religiones… todos trabajando por un mismo objetivo común: el servicio a los demás.
Pero el trabajo de DSR no se limita solo a África. Nuestro proyecto estrella, la Clínica Dental Solidaria Coloma Vidal acaba de cumplir un año tratando a las personas más vulnerables de nuestra sociedad. Día a día diferentes dentistas, auxiliares, higienistas voluntarios pasan consulta de manera totalmente altruista con todas aquellas personas que no pueden costearse un dentista y que vienen derivadas por los servicios sociales de los más de 30 Ayuntamientos de Mallorca que a día de hoy tienen firmado convenio con nosotros o bien que vienen derivados por parte de asociaciones/fundaciones que trabajan con colectivos sin recursos (Cruz Roja, Cáritas, Projecte Home, Deixalles, Mater, Asociación balear enfermedad de Huntington)… Aprovecho una vez más para agradecer a nuestro socio en este proyecto, el colegio oficial de Dentistas de Baleares su apoyo y patrocinio.
No menos importante es el trabajo que lleva a cabo nuestro equipo de sensibilización en Mallorca. Este es el cuarto año que nuestros/as voluntarios/as llevan a cabo diferentes charlas en multitud de colegios de toda la isla con el doble fin de sensibilizar a nuestros peques a cerca de la importancia de la higiene buco-dental, así como intentar explicar este sentimiento solidario que nos impulsa a todos a hacer lo que hacemos.